viernes, 7 de octubre de 2011

Pidal-Cainejo a la norte de Urriello

Angel en la llambrialina


Escaladores:
Teo
Manti
Angel

Vía:
Pidal-Cainejo

Zona:
Picu Uriello (Picos de Europa - Asturias)

En 1904, el Marqués de Villaviciosa Pedro Pidal y Gregorio Pérez "el Cainejo" fueron los primeros en llegar a la cima del Naranjo de Bulnes. Impresionante ascensión hace 100 años, uno con alpargatas y otro descalzo, y sin ningún material aparte de una cuerda de cáñamo. Y no sólo fue la escalada sino que además luego debieron destrepar por el mismo sitio.

Mano-pié de Manti con la sombra del Naranjo

Muchas ganas teníamos a esta vía, así que preparamos el petate y el bigote en honor al Marqués y nos fuimos entre semana a Vega Urriellu. Hicimos noche en el refugio y al día siguiente nos acercamos a la pared con un tiempo perfecto para escalar: solecillo pero bastante fresco en la chimenea de la norte.

Dejamos la “Y” de la cara este a nuestra izquierda y comenzamos la vía en unas repisas un poco más abajo. Los 3 primeros largos son de “navegar” por la pared y bastante plaqueros, con la mítica “llambrialina”, una placa algo tumbada pero con pocas presas que ahora no presenta grandes dificultades pero que hace 100 años no me quiero ni imaginar como la pasaron. Las 2 primeras reuniones se montan en unas cuevas que se ven claramente, todas ellas con clavos que hay que buscar un poco pero se encuentran bien.

Panoramica de Teo

Tras estos largos andamos sin encordar unos 80 metros hasta el hombro de la norte con la oeste. Desde allí tenemos unas vistas impresionantes al refugio de Vega Urriellu con la sombra del Picu y el desplome del Pilar del Cantábrico allí abajo.

A partir de aquí tenemos dos largos muy clavados hasta llegar a la chimenea que no abandonaremos hasta la cumbre, de grado IV+ sin mayores complicaciones. Una vez en la chimenea empieza la parte más delicada pero más bonita de la vía, con varias panzas de burra (V ó V+) que es donde están las mayores dificultades, aunque tanto los pasos clave como las reuniones tienen muchos clavos.

Teo en la chimenea

En 6 horas llegamos a la cumbre, después de la trepada final que hacemos también desencordados y con cuidado para no tirar muchas piedras. Como siempre, el Naranjo nunca defrauda con su roca compacta y su verticalidad.

Me parece muy curioso este link con el relato del Cainejo sobre la primera ascensión: http://www.cabralesfotoaventura.com/index.php?option=com_content&task=view&id=63&Itemid=80

1 comentario:

Pablo dijo...

Muy chulo chavales, pero aqui falta la foto del bigote eh??jejeje