sábado, 28 de julio de 2012

RASTRALES DE LEÓN




El equipo al completo
Fechas: 23-26 Julio 2012

Bikers:
Molus
Aitor
Angel

Ruta: Pedales de León, 240 km y 6.500 m desnivel.

Teníamos previsto hacer algo de bici esta semana y qué mejor que una zona al lado de casa pero que no conocíamos apenas. Sacamos el GPS y nos vamos para allá en “estilo alpino”, una mochililla con lo imprescindible para pasar 4 días de hambre y miseria.


Quedamos en Cistierna el lunes por la mañana y tras 2 desayunos por el camino llega Molus, que con tantos accesorios se da cuenta que no tenía las zapatillas de la bici. No hay problema, 5 minutos y 15 euros después vuelve con unos pedales con rastrales y todos en marcha recordando viejos tiempos. El sol pegaba fuerte y era la 1 de la tarde, así que, como todo el mundo recomienda, salimos a más de 30 grados, perfecto para hacer 60km y 2000m de desnivel positivo. Ya en las primera subida nos damos cuenta de lo que iba a ser la tónica general de la ruta: rampas de más del 22% con firme bastante roto y todos al límite, pero aquí todavía teníamos mucha pata y el desarrollo se movía bien. Por la tarde sufrimos el calor insoportable e íbamos pasando las 5 subidonas de más de 400m de desnivel que teníamos ese día. Entre comidas, calores y sudores llegamos a las 21.30h a Lois donde nos ponemos morados para cenar.

 La otra cara del Espigüete

El segundo día llegábamos a Picos de Europa y como imaginábamos fue la etapa más exigente y bonita. Un etapón de 62km y 1800 metros de desnivel positivo que empieza poco a poco, aunque hoy la marcha empezaría en la primera bajada de 800m de desnivel. Salimos por un sendero muy pendiente dentro de un bosque que a algunos nos intenta (y consigue) desmontar. A partir de aquí terreno impracticable de bici al hombro durante un buen rato hasta una central hidroeléctrica, donde nos encontramos con un paisano que trabaja allí y nos dice que “esa bajada está muy mal para andar”. No podemos reproducir lo que alguno de nosotros piensa de la bajada porque esto lo leen niños. Después de ver cómo se la gastan las bajadas leonesas llegamos a Oseja de Sajambre, donde hacemos una circular por Soto de Sajambre y nos ponemos a comer. Esta dura rampa de pote asturiano nos impide seguir adelante y no tenemos más remedio que echar una siesta el un prao del pueblo. Lo malo fue el despertar que nos esperaba, 800 metros de subida por senderos muy técnicos donde nos tenemos que bajar más de 10 veces de la bici. Un buen rato después aparecemos en lo alto del Puerto de Panderrueda ya sin rastro del pote asturiano, y para abajo hasta Posada de Valdeón. Aquí recibimos la visita del Señor Tesorero del Club Tres Mares en su Vespa que nos trae repuestos para el material extraviado. Unos pantalones para mí que dejé en el hotel del día anterior y una ponchera para Aitor que la dejó “posada” en la primera bajada del día. Importante la caraja que gasta el equipo, no sé ni cómo hemos llegado hasta aquí.

 Posada de Valdeón y Los Picos al fondo

El siguiente día de 67km y 1500m de desnivel empezaba sin calentamientos, 600m de subida muy bonita hasta el puerto de Pandetrave, e inmediatamente empezamos una bajada de 20km por carretera que no nos gustó, seguro que se pueden buscar alternativas para ir por caminos, ¡que esto es MTB, copón¡. La siguiente parte mejora mucho y con el solazo en toda la cabeza pasamos por uno de los sitios más bonitos de la ruta al lado del Espigüete, que no estamos acostumbrados a verlo desde esta cara. Llegamos un con hambre terrible a Besande, así que, como siempre, comilona, vinazo y siestón. Lo malo iba a ser de nuevo el despertar de la siesta, con 400m de subida para apretar los dientes. Finalmente llegamos por una bajada muy bonita de senderos a Morgovejo, y de ahí a Puente Almuhey a 7km que era el sitio más cercano donde había alojamiento.

 Siguiendo el rastro del urogallo cuesta abajo y sin frenos

El último día con las patas bien cargadas salimos pronto a ver si después de 57km y 1500m de desnivel llegamos a comer a Cistierna. Esta etapa no tenía grandes subidas pero era muy rompe piernas, con subes y bajas de 100-150m continuos, casi todo por buenas pistas aunque también algunos senderos muy divertidos. Al final se nos hacen un poco largos por el hambre y el calor los últimos 20km, pero llegamos sin mayores sobresaltos al coche.

El Maño Bravo sigue vivo entre el escobal

En definitiva, la ruta nos pareció bastante divertida excepto la primera parte del primer día y la última del último día, es decir, todo lo de alrededor de Cistierna. Las subidas en su mayoría muy disfrutonas si se está fuerte, sino te pasas mucho tiempo andando. De hecho nos dijo un chico que encontramos por el camino que a esta ruta se le llama “Molinillos de León”. Al final 4 días de auténtico MTB con paisajes y terrenos muy variados, un “paseo” muy recomendable.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Qué campeones!
Creo que hay que estar muy preparado para seguiros!!

isa dijo...

Hola,mirando un enlace de esquí de travesía en Grecia que me han pasado,he llegado a vuestro blog y leyendo vuestra ruta de btt rastales de Leon.Me he quedado alucinado de lo que pueden ser las casualidades.
El " chico (52 tacos) que os encontrasteis era el que suscribe.
Bueno espero ir este año a Grecia.